EN GARZON:EL PROBLEMA NO ES DE TRÁNSITO, SINO DE SU DIRECTOR.
El incremento de medidas de control y seguridad, organizado por la alcaldía municipal, la secretaria de gobierno convivencia ciudadana, tránsito y transportes y la policía nacional, es una respuesta inmediata al llamado de la ciudadanía, que visto sea de paso, parece que no hiciera parte de esta amalgama convocada a tiempo pero choneta.
En algunos lugares de Garzón, se monta el operativo de control con todo lo que se necesita, agentes bien ubicados, cono, grúa, y guardas de tránsito, abordando conductores, pueblo arremolinado al espectáculo muertos de risa, viendo a los violadores de la norma como ratas, en moto, saltando andenes volándose a estampida, en contra vía a toda mecha sin casco, con familias enteras, sin ninguna seguridad, sin documentos y con más papeles una vara de premio.
El operativo es espectacular, y la manera de abordar a los violadores de la norma, buscando persuadir para que respeten la ley, con educación, es un esfuerzo inmenso de la administración; la manera como la policía hace el seguimiento y detención para explicares que no es por los uniformados sino por ellos mismos, es bueno, y así debe ser, pero el alcalde está en mora de darle a transito lo que la comunidad pide y necesita, una persona al frente que sea capaz de sentir su puesto, que tenga suficiente carácter como para salir en defensa de sus funcionarios agredidos, ante los medios y la comunidad solicitando justicia, apoyo y solidaridad, a proponer medidas y defensa de la comunidad agredida y no esconderse, guardar silencio, todo lo contrario afrontar con medidas, que es lo que se requiere en estos casos, no amparándose en el miedo, ni dando informes que de eso se encarga la farándula, sino convenciendo, porque con una sociedad convencida se cuenta.
Carlos Arturo cano es un buen hombre, es más, es un hombre bueno, pero su bonachón parece que estuviera en contravía de lo que se requiere, porque se ha retado a la comunidad, y es la comunidad la que debe responder con firmeza.
Tránsito y transportes tiene recursos para emplearlos en Sociabilización, pedagogía, orientación campañas educativas, pero dejó pasar el tiempo y la oportunidad y ahora le queda el camino de las coercitivas en una respuesta a destiempo, cuando la ventaja la dio el culillo, mostrando como resultado un municipio víctima de la delincuencia y todo por una razón; se hizo caso omiso al clamor y las críticas de la comunidad, dando a entender que lo del director de tránsito en Garzón, es el importaculismo y la improvisación, que ha llegado a tanto que las nuevas señales, en el piso,con ocho días de pintadas, ya se borraron sin ni siquiera quitar las que habían,paradas que son contrarias y esto parece una pelea de indios flechas para todos lados.
El concejo municipal que parece que no aconseja sino que aplaude,porque en lugar de un veto al director de transito, casi que sale en hombros, y si el alcalde Bonilla no aterriza ante esta debilidad sentida , ajustando esta parte, los violadores de normas en moto y la delincuencia, seguirán el sainete, y la comunidad sin la respuesta concreta, entenderá, en una mesa coja, que no se interpreta el momento que vivimos, donde se requiere de verdad y de inmediato, una amalgama como la que hay, pero con secretario enérgico y una comunidad más que informada, convencida, para eso se votó, señor alcalde, para que Garzón, no sea de la delincuencia, ni la de los culillos, sino para que el pueblo vuelva a hacer para todos.